Ante el Consejo Permanente de la OEA, la canciller y vicepresidenta de Colombia, Marta Lucía Ramírez, presentó un balance de lo que ha representado el paro nacional que inició el pasado 28 de abril.
Aunque afirmó comprender la inconformidad de millones de ciudadanos, fue enfática en que la protesta debe siempre tener un carácter pacífico: “Desde el 28 de abril, Colombia ha venido sufriendo una situación atípica, completamente desconocida para nosotros, porque, de la mano de esas protestas, desafortunadamente se ha desarrollado una serie de actividades violentas (…) de unos grupos minoritarios que han utilizado las protestas para destruir, para incitar a la violencia, para salir armados”.
Dentro de las cifras registradas por el Gobierno, expuso las siguientes:
- 14.055 manifestaciones, de las cuales 12.416 han sido pacíficas.
- 1.600 intervenciones de la Fuerza Pública en los puntos de concentración.
“Entonces, que no se diga que en Colombia se desconoce la protesta pacífica porque la Policía está interviniendo”, dijo Ramírez frente a ese último número.
“Lo que le ha sucedió a Colombia puede suceder mañana en cualquiera de los países del hemisferio y es por eso que tenemos que insistir en que la manifestación pacífica es un derecho (…) pero sabemos que estos instrumentos dicen que el Estado tiene que actuar cuando se trata de la defensa y seguridad nacional, de la defensa del orden público y la defensa de los demás ciudadanos”, agregó.
Dijo también que las autoridades han incautado 41.000 armas, entre revólveres, pistolas y armas cortopunzantes. “Tenemos que permitir que las autoridades actúen contundentemente cuando no hay una protesta pacífica porque el Estado tiene la obligación de proteger los derechos de todas las personas”, puntualizó.
En materia económica, dijo que tanto los bloqueos como las manifestaciones le han costado al país cerca de 12 billones de pesos, entre “1.700 bienes privados perdidos, 2.200 bienes públicos, una gran destrucción de la infraestructura y al sistema de transporte público”.
La declaración de la funcionaria se dio luego de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) visitara Colombia para la elaboración de un informe general sobre el paro nacional.
“Hay jornadas de protesta que se utilizan por minorías que tienen el claro propósito de generar desconcierto, caos, destrucción, debilitar la institucionalidad, afectar la gobernabilidad, en fin, desestabilizar a nuestras sociedades”, concluyó la canciller.
Complacida de este primer encuentro con miembros de la @OEA_oficial, en cabeza del Secretario Gral, @Almagro_OEA2015. Enfaticé en la necesidad de fortalecer la cooperación, defender la democracia, solidarizarnos con los migrantes y arreciar lucha contra terrorismo y narcotráfico. pic.twitter.com/tprsUYjGAJ
— Marta Lucía Ramírez (@mluciaramirez) July 1, 2021
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