Opinión del escritor Juan Mario Sánchez Cuervo
“Señor” Uribe, no venga a darnos cátedra de ética y moral cristiana, porque en realidad a usted le importa un carajo la vida. O qué, ¿le parece muy coherente defender una criatura en gestación, pero por otra parte alcahuetear falsos positivos donde fueron asesinados niños y jóvenes y adultos inocentes? Hipócrita, usted no los mata en las entrañas de la madre, pero ni se inmuta cuando están más creciditos . Le recuerdo: usted es un psicópata del poder, un vil dictadorzuelo de los peores de nuestra amada Latinoamérica en toda su socavada historia.
Ahora nos sale su santísimo corazón con una inspiración divina: un referendo en contra del aborto. Y cómo no, es el oportunismo en su más infame expresión, mientras siente pasos de animal grande de la Corte Suprema de Justicia, de la Corte Penal Internacional, y me imagino que de la DEA, de la CIA y de la humanidad entera.
Y no digo de su conciencia: usted hace mucho tiempo dejó morir ese espacio sagrado donde evaluamos nuestros pensamientos, acciones y omisiones. Por eso, usted no se da cuenta de lo horrible que se ve con sus garras y su cabeza de monstruo untada de sangre hasta la coronilla.
Oportunista expresidente, sus homilías de cura depravado ya no funcionan. Y qué ridículo su show de último momento donde funge de adalid de la vida y de los valores cristianos. Como quien dice Satanás mostrándonos el camino que conduce al cielo. Yo lo conozco señor de las sombras y de las tinieblas, así que vuelvo a dejarlo en pelota con sus ardides que exhalan azufre y putrefacción.
“Señor” innombrable que ya nombré pues no le tengo miedo, váyase con su circo y sus payasos a donde sabemos, porque ese referendo no aporta a la discusión que en su momento abrirán los que sí tienen autoridad moral para hacerlo. Por último, yo a usted muy tiernamente, y con profundo respeto, lo comparo con un feto a punto de ahorcarse con el cordón umbilical en la entraña herida de nuestra patria.
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